Seguro que has oído hablar del storytelling. Del inglés «story», historia, y «telling», contar. Se trata de transmitir un mensaje narrándolo como si fuera una historia. Para utilizar el storytelling debemos definir unos objetivos SMART, diseñar de forma creativa la historia a contar para conseguir esos objetivos y analizar posteriormente el resultado. En el artículo de hoy hablamos del storytelling y de cómo esta técnica ha evolucionado y ha dado paso al storydoing.
Beneficios del storytelling
Al aplicar correctamente el storytelling logramos:
- Que el lector o usuario se identifique con un personaje de nuestra historia, preferiblemente con el protagonista.
- Despertar emociones y sentimientos a lo largo del transcurso de la narración.
- Normalmente el mensaje comienza presentando a uno o varios personajes que se enfrentan a un conflicto y lo superan. Muchas veces la forma de superarlo, la actitud del protagonista o el diseño y estética de la historia son los elementos que representan, definen o simbolizan a la marca. De esta forma mejoramos la imagen de marca, asociándola a ciertas emociones o actitudes.
- La memoria. Cuando se hace bien, una buena historia es mucho más fácil de recordar que un anuncio o contenido meramente publicitario. La marca puede permanecer en la mente del consumidor durante más tiempo utilizando esta técnica dentro de nuestra estrategia de Inbound Marketing.
- Crear comunidad. En el caso de que un grupo de usuarios se identifique y el mensaje esté bien definido, se puede crear una comunidad que sientan lo mismo hacia tu marca gracias a la historia compartida.
- Dentro del storytelling podemos optar por contenidos más planos, por añadir interactividad, por mensajes positivos… Hay multitud de opciones y la personalización a la hora de utilizar esta estrategia es infinita.
Evolución de storytelling al storydoing
Como hemos visto, el storytelling consiste en contar historias para trasladar un mensaje clave a la audiencia persiguiendo unos objetivos previamente definidos. Pero, gran multitud de marcas han comenzado a aplicarlo a la vez, y lo siguen haciendo. Esto implica que vivimos en un entorno digital cada vez más saturado y lleno de historias. Y muchas veces las marcas cuentan una historia, pero sus acciones no tienen nada que ver con esa historia o incluso la contradicen.
Por este motivo, el storydoing tiene hoy más importancia que nunca. Y esto no es otra cosa más que pasar de las palabras a los hechos y ser coherentes con lo que estamos contando. Pasar de las palabras a la acción.
La marca debe aplicar y ofrecer una experiencia al usuario acorde a los valores que predica. Y no sólo repetir el mensaje una y otra vez esperando a que alguien se lo crea. Los usuarios están más informados que nunca y necesitan acciones y no sólo palabras.
El storydoing no es un sustituto del storytelling, sino un segundo paso que debe ir unido al primero para que la estrategia esté completa.
No debemos quedarnos en el storytelling, sino evolucionar y pasar al storydoing. Share on X
Beneficios del storydoing
Gracias a la aplicación del storydoing podemos llegar a nuestra audiencia de una forma más cercana y establecer una relación de mayor confianza y compromiso al demostrar que actuamos y somos consecuentes con lo que contamos y transmitimos.
Al pasar de la palabra a la acción, es más fácil aplicar interactividad en nuestra estrategia y que así el usuario se implique mucho más, viva una experiencia diferente y más completa y nos mantenga mayor tiempo en el recuerdo y con una imagen y percepción de mayor calidad.
Podemos crear una campaña de storydoing impactante que nos permita aparecer en medios y ganar impresiones, mejorando resultados, por esta vía. Además, al involucrar emocionalmente al usuario, es más fácil lograr una mayor viralidad y que los contenidos generados a partir del storydoing se compartan más en social media y generen mayor engagement.
Algunos ejemplos de storydoing:
- Red Bull y su evento «Flugtag» («día de vuelo» del alemán). Esta marca creó el Red Bull Flugtag, un evento muy divertido en el que los participantes construyen «máquinas voladoras caseras» y de propulsión humana. Después se empujan desde una cubierta de aproximadamente seis metros de altura por equipos y se ve si logran volar o si caen al agua. Es una experiencia divertida, de trabajo en equipo y llena de creatividad. Luego se valora y premia a los participantes según tres criterios: distancia de vuelo, creatividad artesanal y talento para el espectáculo. Un evento divertido que ya tiene lugar en 60 ciudades alrededor del mundo.
- Coca Cola. La máquina de la felicidad. Este ejemplo es bastante antiguo, pero es un claro ejemplo de storydoing. Con motivo del día de la amistad o día del amigo, Coca Cola crea una experiencia en la que el usuario se divierte y debe colaborar con sus amigos para lograr un descuento. Se trata de alcanzar la ranura de una máquina de bebidas que está mucho más alta de lo normal. Al llegar a ella, se accede a un 2×1 en Coca Cola y para poder subir, uno o varios amigos deben ayudar a otro a subir y llegar para realizar la compra. A partir de esta acción y experiencia se compartieron entre usuarios multitud de contenidos y los medios también se hicieron eco de la acción. Con esta acción, Coca Cola transmite sus valores: felicidad, amistad, diversión. Y utiliza el día de la amistad para contarlo y actuar. ¡Estupendo!
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